sublime es la melodía que de ti me llega, sincera y perfecta, como una luz en forma de esfera, plena, hermosa y de mirada honesta.
No tengo telefóno porque mi cabeza enferma detesta la espera y nunca contesta, se siente confusa y se tumba la siesta, procesos de asimilacion dura y funesta.
Les parece fácil correr dentro del sistema que gira sinestro siempre hacia la diestra reventando indomables miradas de conciencias furtivas, libertarias violentas de mentes abiertas.
no hay lugares suficientemente lúgubres para derramar la sangre que apague esta lumbre, esta hoguera de ilusiones perdidas, destruidas, sepultadas por franquistas que tiran de pipa.
no me intimidan, tus palabras frenéticas acompañadas de drogas y bofetones en comisaría, en mi vida, no sois nada, meros guardianes de mentes vacías, asesinos sin reparos observando por mirillas como consumes tus días, pandilleros enfermos con uniformes de policía actuando siempre con nocturnidad y alevosía.
Hoy no es mi día, por eso os dedico unas palabras de odio y revuelta, llenas de ironía, como las bolsas de muerte que en los ochenta repartíais llenas de heroína.
hoy no es mi día, pero tu hija es ahora la yonki que disfruta comiendo pollas fascistas en conciertos de cerdos que la sodomizan. |