Codificamos sentimientos en interminables gestos que nos alejan cada vez más a unos de otros.
Simplificamos todo porque somos incapaces de asumir la inexistencia de una verdad absoluta a todos y todo, Cuando no nos conviene simplificar, inventamos... y casi siempre ese invento se transformará en una mentira.
La sencillez de las necesidades creadas, frente a la complicación razonablemente explicada de la carencia de voluntad para combatirlas.
La teología de bar no es la que enuncian los santos, sin embargo, esa es la que lleva a la gente a los templos. |